Características del aluminio
Continuando con esta clásica sección de química dedicada a conocer todo sobre los elementos de la tabla periódica, hemos llegado a nuestra decimotercera entrega.
Por ende, hoy vamos a hablar sobre el aluminio, el elemento n°13 de la tabla, un metal blanquecino y plateado, con increíbles propiedades maleables y muy resistente a la corrosión, que ocupa el tercer lugar entre los elementos que más abundan en la corteza terrestre.
Conozcamos las propiedades, los usos y todas las características del aluminio.
Características generales y propiedades del aluminio
Etimológicamente, su nombre proviene del latín alumen, que significa alum o alumbre (un tipo de sulfato doble compuesto). En la antigüedad, el alumbre se utilizaba en las civilizaciones clásicas como astringente y como mordiente en tintorería, especialmente entre los griegos y los romanos.
El químico francés Louis-Bernard Guyton de Morveau propuso cambiar en el año 1761 y así la base de alumbre pasó a conocerse como alúmina, pero en 1787, el gran Antoine Lavoisier señaló que este no era más que un óxido de un metal que aún no fue descubierto.
El descubrimiento del aluminio como elemento químico se atribuye al impecable científico alemán Friedrich Wohler (sí, el mismo que descubrió el berilio), primera persona en lograr aislar el aluminio en forma pura (Oersted lo hizo dos años antes pero en forma impura). Finalmente, Sir Humphry Davy, quien también participó en el descubrimiento del flúor, propuso llamar este metal como aluminio.
En estado puro, el aluminio es un metal blanco y plateado, con varias características que lo convierten en un elemento muy útil para los seres humanos. Es un elemento muy ligero, no es ferromagnético y tampoco genera chispas, siendo el segundo metal mejor maleable que existe, uno de los más abundantes en la corteza de la Tierra (8,1%) y el sexto más dúctil que se conoce.
Algunos de los compuestos de aluminio más importantes son el óxido de aluminio, el sulfato de aluminio y un tipo de sulfato soluble con potasio llamado alumbre.
Si bien es uno de los elementos más abundantes en la corteza terrestre, encontrarlo en forma libre en la naturaleza no es una posibilidad. Se lo puede encontrar en el granito, la criolita y otros minerales comunes similares. El óxido de alúmina sí se produce naturalmente y se lo puede encontrar, por ejemplo, en forma de rubí, zafiro, corindón y esmeril.
No obstante, la mayor parte de aluminio que hoy tenemos procede de una mezcla artificial de sodio, de aluminio y calcio, y de algunos fluoruros. También puede producirse a partir de arcilla, pero el proceso no es económicamente viable, por lo cual no es de los comunes en la actualidad.
Otros datos:
- Número atómico: 13
- Peso atómico: 26.981538
- Símbolo atómico: Al
- Punto de fusión: 660.32° C
- Punto de ebullición: 2519° C
¿Para qué se usa el aluminio?
Los usos del aluminio más comunes refieren a la producción de utensilios de cocina, revestimiento para construcciones y toda clase de elaboraciones y aplicaciones en la industria. Debido a su peso tan ligero, en ocasiones se lo emplea en líneas de transmisión eléctrica, aunque a consecuencia de su conductividad eléctrica, no es de los materiales más frecuentes en dicho ámbito.
Para volverlo aún más útil y resistente, se realizan aleaciones de aluminio con cobre, magnesio, silicio, manganeso y otros elementos que lo convierten en un material más fácilmente aplicable. Estas aleaciones se utilizan en la fabricación de aviones y cohetes, por ejemplo.
Finas capas de aluminio se usan como capas protectoras que difícilmente se deterioran y que se emplean en la elaboración de muchísimos objetos, desde telescopios a decorados y hasta juguetes.
El uso más habitual o quizás al cual más estamos acostumbrados es el de las latas de aluminio para refrescos, ya que la maleabilidad y la fuerte resistencia del aluminio frente a la corrosión lo vuelven el material perfecto para ese fin.
Bien, ¿qué te parece? ¿Qué otras cosas
sabes tu acerca del aluminio?
No hay comentarios:
Publicar un comentario